Crónicas marcianas...

Todo ocurrió , una hora más tarde de que nuestra nave amartizase en un local nocturno lleno de seres extraterrestres y en el cual, yo era la mayor marciana del momento, no obstante como en todos los bares de moda (sean de Marte o no..), en cuanto libas un poco del nectar narcotizante que tan amablemente te ofrecen, ya empiezas a notar que encajas un poco más , o mejor dicho que si no encajas ya no te importa demasiado...
Pero al cabo de un rato, mi nivel de oxígeno se estaba acabando y decidí que ya era el momento de regresar a la Tierra, hecho que comuniqué al resto de la tripulación (que a esas horas estaban bastante dispersos..todo hay que decirlo) asi que cuando estaba empezando a encapsularme el casco espacial y los guantes, me interpeló un hermoso especimen masculino al cual ya había observado previamente ( con fines únicamente científicos..no os vayais a pensar..) y mirándome directamente a los ojos, me dijo..-Te tomas una copa conmigo?.Y yo no se si fue la falta de oxígeno en el cerebro, o sus bonitos ojos verdes, o el hecho de que hacía mucho tiempo que no suscitaba un interés genuino en un desconocido, que me sorprendí a mi misma contestándo un sorprendente ...Si...
Mantuvimos una conversación larga e intrascendente, nos tomamos un café en una cafetería de un amigo suyo , es decir me llevó a un sitio donde yo podía sentir que no era un desconocido, y luego siguiendo su política de ir directamente al grano, me preguntó si había alguna posibilidad de que durmiéramos juntos...lo cual hizo que soltase una carcajada tan grande, que incluso pareció ofenderse por mi reacción...
Le expliqué (cosa que yo creía que no hacía falta explicar) que no le conocía en absoluto, y en consecuencia no podría compartir un acto tan íntimo y personal como dormir con un completo desconocido, también le indiqué que mi casa era mi templo, y que jamás llevaría a nadie con el cual no tuviera un cierto grado de familiaridad...
Pareció entenderlo, era (y supongo que seguirá siendo, si es que no se ha muerto del viernes para acá) un hombre muy bien parecido, un poco inmaduro (a juzgar por sus pretensiones) pero muy correcto y educado, al cual le agradecí profundamente su interés, y después de acompañarme a un taxi lunar, me dió dos besos en la mejilla , y me recordó que yo era muy guapa....

Lo cierto es que me fui muy contenta a casa, no sucedió nada, no ocurrió nada digno de mencionar, pero a mi me gustó gustar a alguien que, si llegara el caso, también podría gustarme, ...y eso, como dice el anuncio, no tiene precio.....


Esta canción sonó instantes antes de conocerlo...., simplemente me encanta....