CUANDO NO ME VEÍA NADIE

viernes, 10 de septiembre de 2010

Una paloma acurrucada...

Me había prometido a mi misma no volver a volcar en este blog,ni mis alegrías ni mis desdichas, pero como la mayoría de mis autopromesas, ésta también la voy a incumplir.. es más que evidente que no tengo fuerza de voluntad, todas las cosas que me provocan placer, más tarde o más temprano me provocarán daño... y, a pesar de todo ello, no puedo sustraerme a ellas..., y luego como una pecadora arrepentida, lloro por las esquinas , lamentando mi debilidad y mi estulticia..
Un buen amigo, me dijo que cuando me conoció, yo era una paloma acurrucada en el alfeizar de una ventana, ahora cree , erróneamente, que soy una especie de águila.., pero me temo que poco o nada ha cambiado en mi, sigo siendo una paloma, pequeña y asustada.., pero tengo que decir que aún con todo y con eso, no soy ni seré presa fácil de los halcones y mucho menos de las águilas..
Este amigo me invita a volar, a ser libre y a disfrutar de mis recién estrenadas alas..., me temo que tendré que practicar y practicar.., pues volar requiere unas aptitudes que yo , aún, no tengo desarrolladas..., pero prometo aplicarme mucho, y con su ayuda y mis ganas..., pronto ,muy pronto volaré..a tierras lejanas..

2 comentarios:

  1. para volar hace falta musica

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  2. Qué hermoso! El horizonte siempre nos depara alegrías, todo se ve mejor con un poco de distancia
    Un beso

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