Sin miedos...

El miedo, es un tema recurrente en mis escritos, y lo es con personalidad propia, porque soy consciente de que los mayores logros de las personas, se consiguen de una manera siempre extrema, o teniendo mucho miedo, o no teniendo absolutamente nada...
Sin embargo, la mayoría de los comunes que por aquí pululamos , nos caracterizamos por sentir tibieza en todas y cada una de nuestras emociones, de tal modo que, en el caso del miedo, sentimos el justo y necesario para paralizarnos, y en el caso de no sentir miedo ( cosa rara),  tampoco denotaríamos ninguna conducta extraña.
El miedo no existe por que si, es un mecanismo de defensa, de alerta ante la peligrosidad de las circunstancias, en cualquier animal cuadrúpedo ( y en algún otro bípedo) significa, más bombeo de sangre al cuerpo, mas adrenalina segregada..., los sentidos a la máxima potencia, y el estar alerta, para poder actuar con la celeridad necesaria que permita salir indemne de la situación presentada...
Pero, los humanos, en nuestro afan por diferenciarnos del resto de mamíferos, no sentimos sólo miedo , por ver peligrar nuestra integridad física,  sino más bien no hemos especializado en sentir miedos sicológicos ... y aquí surgen un enorme abaníco de posibilidades a escoger, para ponerle nombre a todos y cada uno de nuestros temores...
En mi caso, tengo miedo a casi todo...a enamorarme, a no enamorarme, a equivocarme , al futuro, al pasado, al presente... a la oscuridad, a la luz cegadora...a quedarme invidente...
Sobre todo el miedo que más puede trastornarme, es el miedo a equivocarme, tengo un sentimiento de responsabilidad tan grande conmigo , y con respecto al prójimo, que arrastro años y años, los resultados de todas aquellas equivocaciones que,  de manera involuntaria, hirieron a alguien...y eso hace que jamás esté segura de las decisiones tomadas...
La duda, no deja de ser un miedo más..., la duda , hace que te replantees una y mil veces, todas la alternativas posibles, a la decisión tomada...y , a pesar de ser consciente ( más que nada por la edad, que de algo tenía que servir, aparte de acumular arrugas) de que la realidad, nunca encaja con lo que teníamos en mente, insistimos en elucubrar, adelantar, realizar hipótesis y pronosticar....el resultado a obtener, para así, de ese modo, autotransmitirnos confianza...
Tengo la desgracia, de pensar más de la cuenta, y eso hace que multiplique en la misma proporción todas mis fobias, pero no así , mis filias..., con lo que si normalmente la gente no reacciona...en mi caso, cuando siento miedo, me quedo como los armadillos....completamente inerte...