CUANDO NO ME VEÍA NADIE

martes, 9 de abril de 2013

Érase una vez ...

Érase una vez, una princesa de tez blanca, plagada de pecas..., cuya existencia transcurría plácidamente , entre hablar con los pájaros y el resto de animales que poblaban el reino...y tomarse de vez en cuando una botellita de Moscato ( del barato) para darse un homenaje, y seguir tirando.. Era buena, muy buena, era correcta, amable, sincera, divertida, alegre pero fundamentalmente buena..., también era confiada , porque sí, porque lo era...porque a fuerza de hacer el bien, de pensar bien, de recibir bien...el cerebro se le atrofió de tal manera, que le daba por confiar en todo quisqui...aunque ese quisqui no se lo mereciera... Hete aquí, que la princesita estaba un poco hasta la peluca..., por mas que se esforzaba...por mas que cumplía las normas, por mas que se entregaba..., el resultado era el mismo... en aquel tranquilo ( y puñeteramente aburrido) reino, nunca pasaba nada...
 Hasta que un día, llegó a sus dominios un príncipe extranjero..., que no era ni alto ni bajo, ni blanco ni negro, ni rico ni pobre,ni guapo ni feo, ni siquiera malo ( pero tampoco bueno) , este extraño sujeto tenía la particularidad de ser exactamente lo que ella ( u otras) estaban buscando...no necesitaba esforzarse, era experto en leer en los corazones hastiados de princesas solitarias... El príncipe , como no podía ser de otro modo, estaba maldito...,una malvada bruja lo tenía hechizado,se hacía vieja y no tenía a quien transmitir toda su maldad, asi que decidió que no habría princesa en el mundo que pudiera amarle de verdad ,condenándolo  a vagar por el mundo enamorando, tentando, y seduciendo a todas las princesas que pudiera...pero si alguna de ellas se enamoraba..., Ah! .. al instante de rozar sus labios..., ésta, se transformaría ...dejaría de ser la que era..., dejaría a un lado, la bondad, la empatía, para simplemente convertirse poco a poco , a través de sus besos y sus caricias...en una princesa oscura, de apetitos turbios, de deseos incontrolados, de egoismos subyacentes...para ser, exactamente, todo lo que , la princesa, siempre había rechazado...
No obstante, la maldición no afectaba a todas las princesas por igual..claro..., sólo era totalmente efectiva en aquellas que, en el fondo, y quizás sin ser plenamente conscientes de ello, tal vez, y sólo tal vez...no eran tan correctas y buenas como se imaginaban... Asi que el príncipe sólo tenía que echar el lazo..., y cuando una ( la única , pues sólo podía ser ella) se dejase tentar..., la bruja la tomaría bajo su cargo...pues es de todos sabidos, que no hay malo mas malo que aquel que algún día , fue bueno, y de repente se pasa al otro lado...

(continuará)

2 comentarios:

  1. Juguemos al escondite. Si me encuentras te dejo seducirme. Y por si no me encuentras... estaré en el armario :P

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    1. Mi querido Stico....una vez más, sólo tu eres certero como una bala...
      Pero me temo que la seducción, al menos en este caso, se acaba....

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